Nadie se llevó el pozo del Loto y ya van 17 sorteos (casi un mes y medio) sin que se registren ganadores. Seguramente dentro de poco aparecerán uno o más suertudos que se repartan el premio y esto tiene que ver más bien con la cantidad de cartillas que se juegan que con la cantidad de sorteos que han pasado sin ganadores. Efectivamente, la cantidad de apuestas aumenta dramáticamente a medida que el pozo se acumula, pues hay más personas interesadas en jugar, y la mayoría de jugadores “esporádicos” prefiere jugar al azar. Sospecho que la cantidad de cartillas iguales que pueda generar el sistema de apuestas al azar debe ser bastante baja, ya que hay más de 4 millones de combinaciones desde donde escoger. Por lo tanto, mientras más personas jueguen al azar, más combinaciones distintas participan y por lo tanto menos posibilidades de que una combinación no jugada sea la ganadora.
No se engañe nadie pensando que ahora es la oportunidad de jugar y ganar, ya que, aunque la probabilidad de que ahora aparezca un ganador es mayor, individualmente la probabilidad de que su cartilla sea la ganadora sigue siendo la misma: una o dos entre 4.496.388 combinaciones posibles si juegas una o dos cartillas diferentes.
Una cosa sigue siendo segura: para tener alguna posibilidad de ganar el Loto, hay que jugar al menos una cartilla. Esta puede ser al azar, con tus números de siempre o producto de un estudio estadístico acabado. Finalmente, la probabilidad de cualquiera de ellas será la misma, pero, si está basada en estadísticas al menos las decisiones sobre qué números jugar dependerá sólo de nosotros. ¡ Buena suerte a todos los apostadores !